Basada en las experiencias del director A.S.Neil, en su
propia escuela, Summerhill. Me parece increíble todo lo que se consigue dando
libertad a los niños, que sean ellos mismos quienes se auto controlen, dando
las obligaciones que pueden ellos gestionar.
He observado a través de este libro lo que puede afectar en
cada uno de nosotros la educación y no me refiero a aprender a sumar, restar,
dividir o leer, que pueden ser cosas complementarias, sino a lo que influyen en
nosotros nuestros padres, la sociedad, la religión y todas aquellas cosas que
forman parte de este mundo en el que vivimos, como hay padres que para mantener bajo su
poder a sus hijos usan el miedo pero si te fijas más puedes ver que todo lo que nos
rodea está enfocado en ese camino en hacernos creer que hemos sido educados en
libertad tanto de ideas como de movimiento, pero lo cierto, es que no.
Creemos que vivimos libres y nuestra realidad es que
esta sociedad nos hace vivir en el “Mundo Feliz” de Huxley donde
se temen las ideas nuevas y los que viven diferente.
Me parece que este libro puede ayudarnos a intentar educar a
nuestros niños para que sean felices y libres en este mundo que marcha sin
rumbo.
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